Mi forma de escribir es del tirón, una hoja en blanco y las letras fluyen una a una. Luego, la corrección que tengo que hacer es mínima.
Entonces, ¿por qué este libro ha sufrido numerosas correcciones?
Como os he contado en ocasiones anteriores, yo empecé a escribir el libro entre marzo y abril del año 2011, pero por mi falta de constancia, lo dejé durante bastante tiempo en varias ocasiones. Esto provocó que cuando decidía volver a continuarlo, debía releerlo para volver a entrar en la historia y seguir con un estilo similar. Cada vez que hacía esto, de paso iba corrigiendo cositas.
Además, según las lectoras cero iban leyendo la historia, también había algunas cosas que me iban comentando para que cambiara.
Después de unas cuantas correcciones, me decidí a registrarlo el 23 de febrero de 2012. Después de lo cual, lo envié a editoriales. Durante la espera, se lo pasé a otra lectora cero, lo cual dio pie a una nueva corrección.
Mi hermana no hacía más que repetirme que era el libro de las eternas correcciones.
Y llegó un momento en que me vi inmersa en el mundo editorial en general y en la corrección en particular. Me instruí, aprendí y comencé a corregir. Y una correctora como yo, no podía permitirse tener un manuscrito de la forma en que estaba. Así que decidí realizar una última corrección para que quedara todo lo más perfecto posible.
Ahora ya está listo y no pienso corregirlo más hasta que pase por manos de la editorial, pues si nos dejaran, los autores nos pasaríamos la vida corrigiendo y corrigiendo el mismo manuscrito sin parar.